martes, 25 de febrero de 2014

¡Hola!

Tras mucho tiempo sin escribir, voy a publicar una nueva entrada para compartir una experiencia. Se trata de una actividad que he hecho con mis alumnos de 4º de Educación Primaria.

La tarea ha consistido en recrear un diálogo entre los alumnos. Había dos roles: vendedores de un supermercado y clientes. Pero antes de comenzar hemos repasado los número del 1 al 100 y los nombres de varios alimentos. Además, antes de empezar algunos alumnos, por parejas, han teatralizado el diálogo de manera que todo el mundo comprendiese la dinámica a seguir. Con mi ayuda del maestro, el cual les iba guiando si se perdían en el diálogo y les ayudaba con la pronunciación, estas parejas han ido realizando la actividad.
Una vez que a toda la clase le ha quedado clara la tarea se ha separado la clase en dos (compradores y vendedores). Al ser un grupo de 20 alumnos se ha establecido que no podía haber dos clientes por vendedor a la vez, de manera que siempre hubiese 10 parejas en activo realizando la compra venta.

Durante esta sesión he contado con la ayuda de una auxiliar de conversación americana que actualmente acude al centro; hecho que ha facilitado el poder supervisar que la actividad se llevase a cabo en inglés y los alumnos que tuviesen dudas podían preguntarle tanto a la auxiliar como a mí.

La verdad es que la actividad, aunque corta, ha gustado muchísimo. Los alumnos estaban llenos de energía, han practicado el diálogo en inglés, se les insistía en que acabasen las frases correspondientes con un "please" o "thank you" y a ellos mismos les ha parecido genial la idea propuesta al principio de la sesión.

No incluyo ninguna foto de la actividad porque no hago fotos dentro de clase, pero la foto que he adjuntado es de un catálogo de comida de un supermercado (imagen de internet). ¿Por qué? Los niños que tenían el papel de vendedores han tenido recortes de productos con los precios reales que he cogido de varios catálogos de un supermercado de mi zona. Antes de repartir los alimentos los hemos repasado todos en voz alta para que no hubiese dudas al respecto.

Estoy contento cómo ha terminado la actividad; la auxiliar se ha visto sorprendida por la motivación de los niños y ella también ha participado como un cliente con aquellos alumnos (vendedores) que en algún momento u otro no tenían alguien que les comprase.

Cualquier comentario será bien recibido.

Pedro